Hasta ahora no tengo respuesta.
Porque pareciera entonces que todas las bandas de rock de esta tierra sonaran a lo mismo, cuando, por otro lado, se habla mucho de la variedad musical de la capital de Antioquia.
Así que esta columnita tiene el propósito de ser interactiva, digamos, adaptándonos al medio. La pregunta ya está planteada: ¿A qué suena Medellín? ¿Sí será tan cierto eso de un sonido típico? ¿O hablarán más bien de la calidad de la grabación?
Y es cierto: muchos no hablan del “rock hecho en Medellín” sino del “rock de Medellín” como si eso fuera un género como tal con ciertas características claras. ¿Será eso cierto? ¿Habrá alguien que me responda?
Y ya que hablamos de nuestro rock, voy a darme una licencia para contarles, al mejor estilo de una revista de vanidades, mi Top 10 de los álbunes grabados en Medellín. Quizás de aquí salga también otra discusión, y eso estaría bien. Entonces, aprovechando la ocasión preguntona, ¿cuáles son los álbunes de rock en Medellín que a ustedes (uno o dos lectores que tengo) les gustan más? Los míos son (y lo más difícil es darle órden de importancia), en el puesto 10. Los árboles, de la banda con este mismo nombre, uno de los más desconocidos e inteligentes discos producidos en esta tierra. Un sonido rock suave, atrevido, cargado de detalles sonoros y experimentación con otros instrumentos. Una “rareza” que hace mucho no se repite. 9. Rojo sobre rojo, de Estados Alterados, quizás el álbum mejor grabado de esta banda, con buenas canciones como Te veré y Fiebre de Marzo, que cerraron la carrera de este grupo que muchos comparaban con Depeche Mode. La carátula es hermosa también. 8. Niño Gigante, Ekhymosis: El primer disco de esta banda me recuerda mucho al álbum negro de Metallica. Si bien no está muy bien grabado, su crudeza, sus letras, la calidad de las guitarras, hacen que sea mi favorito. Ninguna versión de Solo ha logrado superar la primera. 7. Huella y camino, Kraken: No es fácil que un algún álbum en vivo salga bien, sin embargo este de Kraken quedó tan bueno que lo prefiero incluso a los de estudio. Están las canciones que deben estar, con un sonido vivo y el estilo de una banda hasta ahora insuperable. Las letras son buenas y las guitarras sí que más, hasta el punto de no entender por qué esta banda no llegó a ser un éxito internacional si, de alguna forma, lo tenía todo. 6. El camino, de Coffee Makers: Uno cree, en primera instancia, que los Coffee son “Sábado en la noche” y mucho Ska. Nada más equivocado. Son mucho más, un sonido regge y dub, canciones instrumentales de buen sonido y variedad musical. Otra banda que, si la vida fuera justa, debería estar ahora mismo de gira por Europa. 5. Carne trémula, Nadie: Un álbum crudo, en un punk que no se encasilla. 4. La identidad en el caos, Frankie ha muerto: A pesar de que esta banda ya va por su tercer álbum, el segundo es el que más me gusta, un disco compacto, original, oscuro. Las letras de Fabio Garrido poseen poesía y vienen acompañadas de una música que se ajusta a ellas. A Baudelare le hubiera encantado. 3. Parlantes: uno de los discos más juguetones, mejor grabados y más originales que se hayan hecho en Medellín. El estilo de Camilo Suárez es muy particular, con referencias literarias y coqueteos con la música colombiana que le quedan muy bien. Una verdadera joya musical, como dirían los promotores. 2. Los días adelante, Bajo tierra: Una banda que siempre ha ido a la delantera y que lo demuestra con su tercer álbum, editado en el 2005. Los días adelante recuerda a cierto sonido ochentero, con voces sobre dobladas y guitarras melódicas. Para muchos es el mejor álbum de esta banda, aunque... 1. Lavandería real signifique un momento especial en el rock de esta tierra. De alguna forma, debe ser ese estilo lo que los de afuera encasillan como el “rock de Medellín”, supongo: un rock urbano, rítmico, hecho para los bares y para el baile.
Y la ñapa: álbunes que no alcanzan a entrar en este listado pero que también me gustan mucho: Eléctrico y doméstico, de El pez, y los de Los Insectos, Burkina y de Bruces a mí.
Y repito las preguntas, en esta columna atípica: ¿a ustedes qué álbunes les gusta? ¿Qué es eso del rock de Medellín?
El que responda se gana un yoyo.
Y la ñapa: álbunes que no alcanzan a entrar en este listado pero que también me gustan mucho: Eléctrico y doméstico, de El pez, y los de Los Insectos, Burkina y de Bruces a mí.
Y repito las preguntas, en esta columna atípica: ¿a ustedes qué álbunes les gusta? ¿Qué es eso del rock de Medellín?
El que responda se gana un yoyo.